viernes, 25 de enero de 2013

Desde Málaga con amor




Amor al fútbol. El encuentro entre el Málaga, sin Isco, Toulalan ni Monreal, y el Barcelona con su once de gala fue una oda al fútbol, un partido precioso para el espectador. 6 goles, ocasiones clarísimas, un marcador que va y viene… Un partido de Copa del Rey que nos dejó a todos con una sonrisa en los labios.

El partido deja varios apuntes.
1 – Joaquín está alcanzando su cima futbolística a sus 31 años. Martirizó a la zaga azulgrana, sobre todo un Mascherano desubicado y además sufriendo horrores contra Santa Cruz. El paraguayo dio una lección de delantero boya que baja todos los balones que le lanzan.

2 – Busquets anduvo perdido entre meterse entre centrales para ayudar en defensa y para luego sacar la pelota, y al mismo tiempo intentar realizar la presión alta. Partido raro el suyo, no recuperó ningún balón en campo contrario.

3 – La segunda parte de Messi fue fabulosa. Se plantó en tres cuartos de campo, montó la tienda de campaña, y nadie fue capaz de sacarle de allí. Se quedaba con todos los balones que llegaba, aguantaba el cuero para que sus compañeros se puedan colocar, y entonces elegía entre pasar o machacar verticalmente gracias a unos regates marca de la casa. Cuánto tiempo es capaz de aguantar la pelota rodeado de adversarios ? Tres segundos, diez, lo que haga falta. Segunda parte verdaderamente asombrosa.

4 - Piqué estuvo varias veces en posiciones de ataque, e incluso marcó el 1-2. La sangre fría que demuestra a la hora de bajar el balón, colocar el cuerpo y mandar la pelota fuera del alcance de Kameni no es propio de un central. Pero Piqué no es un central al uso. Ya demostró tener nervios de acero y una calidad técnica muy de delantero en aquella semifinal contra el Inter.


5 – El despliegue físico de Fábregas fue demoledor. Recorrió el campo entero y no paró hasta el último minuto. Parece que el ciclo de recuperación en el tramo navideño tras su lesión ante el Betis le sitúa muy por encima de sus compañeros en el plan físico.

6 - Cuando el conjunto catalán obtuvo el 1-2 que le clasificaba, no supo frenar el partido intensísimo y volver a sus raíces. Siguieron mandando la verticalidad y las prisas por cerrar el partido. El resultado fue un partido precioso por el espectador, pero de muy poco control por los culés. Bajo el mandato de Pep, Xavi habría agarrado el balón junto a Iniesta y el rondo por todo el campo habría enfriado a los malaguistas. Pero la presencia de Fábregas y el estado de forma de Xavi lo impiden, y nos tendremos que acostumbrar a este nuevo estilo más espectacular, pero menos fiable.

7 - En medio de tanto vértigo, la pausa es un bien preciado. Tanto Alves como el propio Fábregas, en el 0-1 y el 2-3, supieron aguantar medio segundo antes de dar el pase definitivo y así dejar al Málaga fuera de juego, vencido por la excitación.

8 – Al final la sensación es que el Barcelona no ganó por ser un equipo mejor plantado que el Málaga. Ganó porque Messi e Iniesta fueron muy superiores a sus rivales e inclinaron la balanza a su favor. Contra rivales con individualidades más fuertes, dígase en la Champions o contra el Madrid más inmediatamente, la excelencia técnica tendrá que verse soportada por el juego de equipo, como venía siendo en noviembre y diciembre del año pasado.

El partido fue muy espectacular y es lo que quiere ver el aficionado. Pero el staff técnico del Barcelona se repasará varias veces el DVD del encuentro, ya que hay unas cuantas cosas para corregir. Sobre todo este afán de verticalidad incontrolada cuando se tendría que imponer la posesión defensiva.


@busi1325

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